Somos uno, estamos conectados.

Creo que la vida te habla se comunica te deja mensajes por doquier, el único requisito es estar alerta. El mensaje más recurrente que estoy recibiendo desde hace varios días: es el mensaje de la unidad.

Sentir desde el fondo de mi corazón que estamos conectados. ¿Quienes? Todos los seres vivos en el planeta; plantas, animales, humanos y el planeta mismo.

Entonces entiendo el significado del “hombre del espejo” y “ama a tu prójimo como a ti mismo” y “la ley del espejo”. Comprendo que para sanar al mundo tienes que empezar el sanarte a ti mismo.

Todos estos son conceptos trillados, oídos y repetidos más de mil veces, pero la verdad no los entendemos. No lo tenemos integrados en nuestro día a día. Cuando no dejamos de criticar, de juzgar de ser mezquinos de no alegrarnos de corazón por los logros de otras personas, no somos capaces de dejar la competencia.

Deepak Chopra, dice “Cuando elevo el nivel de conciencia de abundancia, hago mi parte para sanar el mundo”. Otro de los mensajes, que me llegado para sobre el tema de la unidad.

Una forma de elevar la conciencia es ser coherente, ser coherente me ha traído grandes regalos, algunos de ellos todavía no alcanzo a ver los frutos que traerán a mi vida, pero intuyo la magnitud. De solo escribirlo siento mariposas en el estómago de anticipación.

Volviendo al mensaje de la unidad, estamos hermanados por nuestro origen divino, porque creo firmemente que somos seres espirituales compartiendo pupitre en esta escuela que es la vida.

No pretendo ser santa, pero me comprometo a ser mejor persona cada día y a nunca dejar pasar la oportunidad de ayudar a personas, animales o plantas. Creo en el efecto mariposa.

Me comprometo sobre todo, a cuidar a la mujer del espejo. Me comprometo a amarme incondicionalmente, a respetarme, a ser autocompasiva, a escuchar a mi cuerpo que nunca, nunca miente.

Te invito a cuidarte, a evitar la crítica y a juzgar a otros. concéntrate en ti, en ser mejor persona cada día.