
La magia de echarse a andar
Caminar para ser feliz. La magia de echarse a andar es que no necesitas nada, ningún equipo especial, sólo las ganas y el impulso, un paso después del otro. Si he de ser sincera, a veces he salido a caminar sin gana alguna, sólo por el mero propósito de aplacar las culpas luego de una opípara comida y después de un rato camino por puro placer.
Poner un pie delante del otro, un paso, otro y otro, entonces ya no pienso en nada y soy toda sentidos. Admiro las ramas de los árboles, sus formas caprichosas. Escucho el sonido de los pájaros. Respiro profundamente. Percibo los olores, absorbo todo a mi alrededor, escucho la naturaleza que me embelesa y me calma. Qué fortuna tan grande poder caminar en el bosque.

Más allá de los muchos beneficios físicos que aporta caminar, para mi es una experiencia espiritual, la sensación de paz que consigo es similar a la que consigo luego de la meditación.
Algunas veces siento la necesidad de caminar sola, o en compañía de alguien que no malinterprete mi silencio. Entonces entro en modo de contemplación y movimiento lento silencioso.
Otras veces mis caminatas son rápidas, escandalosas, vibrantes, acompasadas al ritmo de un merengue o una salsa que me obliga a cantar a voz de cuello. Me he descubierto meciéndome al caminar, entonces soy pura dicha, soy cumbia, soy merengue, soy puro guaguancó, soy calor, soy caribe.

También camino mis preocupaciones. Cuántas veces he caminado mis problemas, salgo a caminar cuando el agobio me consume. Camino y sigo en mis cavilaciones, luego se calman mis pensamientos y de repente como un rayo viene a mí la solución.
Saco a pasear mi mal humor, cuando el mal genio se apodera de mí, y no me soporto ni yo misma, me calzo mis zapatos y me lanzo a caminar. Al cabo de un rato el mal humor se pierde en el camino, me abandona ofendido ante mi indiferencia.

Caminar nos hace más inteligentes y saludables y no sólo lo digo por experiencia propia, existe abundante literatura al respecto. Una de mis literaturas favoritas por lo bien documentada es el libro del neurocientífico irlandés Shene O´Mara “In Praise of Walking, (Elogio al caminar)”.
O´Mara escribió en su libro que caminar no sólo es bueno para nuestro corazón, pulmones y estado físico, sino que además es esencial para una función saludable del cerebro.

En su libro nos invita a maravillarnos de los beneficios que supone poner en marcha cada día esta práctica para nuestro cuerpo y mente. O´Mara piensa que los médicos deberían recetar caminar 5.000 pasos al día en lugar de pastillas.

El libro es resultado de una extensa investigación, que demuestra que caminar regularmente beneficia el estado de ánimo, la memoria y la resolución de problemas, y también puede proporcionar alivio para dolencias como la depresión y la ansiedad.
Elogio al caminar celebra esta habilidad milagrosa y lo une a la última investigación, la que revela ahora cómo el cerebro y el sistema nervioso realizan la magia mecánica de equilibrarse, navegar por una ciudad abarrotada o ejecutar nuestro GPS interno.
Mi lugar preferido para caminar es el bosque, pero si vives en la ciudad también puedes incorporar este hábito a tu rutina diaria. El buen doctor O´Mara nos llama a ponerse un par de zapatos cómodos y la voluntad de adoptar el caminar como parte de nuestra rutina diaria. Y si las distancias son demasiado grandes o el tiempo es demasiado corto para caminar hacia o desde el trabajo, él recomienda subir o bajar del metro o del autobús un par de paradas antes de lo habitual.

Del libro de O´Mara se concluye, que:
- Podemos acostumbrarnos rápidamente a las caminatas, porque nuestro cuerpo está construido para caminar.
- Caminar reduce el riesgo de enfermedades cardíacas, porque reduce las grasas que obstruyen las arterias.
- Caminar mejorar el sistema inmunológico.
- Caminar puede mejorar la memoria.

Me imagino que, si llegaste aquí, ya debes estar con ganas de moverte, no te detengas, haz de caminar una parte de tu rutina.
Caminar es parte del estilo de vida Slow Life del cual soy ferviente promotora. ¿Te gusta caminar? ¿Cuál es tu lugar favorito? Escríbeme.
Me encanto! Y tal cual lo que predices, quisiera salir a seguir caminando! (Ya hice mi caminata mañanera ☺️). Hermosas fotos!
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Gracias Andre, no tienes idea de lo que me alegran tus palabras. Soy dichosa! Caminar es mi forma de acercarme a lo divino, me pierdo en la contemplación.
Un abrazo.
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Es lo máximo me encanto
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Hola Marisela, gracias por comentar. Qué bueno que te gustó. Un abrazo.
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